Campobravo

Por: Inés Molina

Si buscan un lugar que combine las mejores carnes, música con onda y tragos deliciosos, les recomendamos pasarse por cualquiera de sus locales. Sabor y diversión garantizados.

Cuál será el secreto de Campobravo? Lo preguntamos mientras buscamos un lugar entre las mesas atestadas de gente.

Mayra, la simpática moza del salón, nos encuentra enseguida una mesita reluciente, apoyadita contra una columna. En las mesas vecinas hay gente joven, llena de buena vibra, charlando a los gritos sobre la música electrónica que reina en el local. También hay grupetes de amigos varones, que toman cerveza importada mirando los partidos de la liga europea que pasan sin sonido por los plasmas.

La luz está atenuada, como en la previa de un boliche. Hay ganas de bailar en el aire, cierto clima de festejo en ciernes.

Si quieren meditar, no les recomendamos Campobravo. Esta parrilla es para celebrar la vida mientras se come un exclusivo corte de vacío a punto, regado con los vinos de las mejores bodegas.

Los platos son típicos de una parrilla campera, pero las carnes tienen el tratamiento y la calidad de la cocina gourmet. Lo más pedido es el bife de chorizo Campobravo, quinientos cincuenta gramos de sabor que hacen que los turistas visiten el salón atraídos por el aroma y la bondad de la carne argentina. El dato: no se pierdan el matambrito tiernizado. Lo sirven con rodajas de limón y es una verdadera manteca. Se pueden acompañar con morrones asados a la oliva, que son una delicia, o papas fritas, puré de calabaza, ensaladas o el tradicional tomate partido al medio. Sencillas pero eficaces, las combinaciones son bien criollas pero con un toque chic que hacen de Campobravo la elección correcta. También sirven empanadas fritas para los más atrevidos.

Las pastas caseras están muy tentadoras acompañadas por un Malbec.

De postre, nada mejor que las Texturas de chocolate, una tarteleta de chocolate amargo con salsa de frambuesa y bocha de helado cremoso.

Campobravo tiene local en Las Cañitas pero este de Palermo que visitamos tiene la atracción extra de la terraza: un exclusivo espacio en donde se reúne lo mejor de la movida DJ y se planifican eventos con figuras de la noche porteña.

Visitamos el lookhouse, que ardía de gente con una barra bien surtida. Por membresía se puede acceder a Club V55, noches de música, tragos y lo mejor de la música electrónica.

Si te gusta el ruido, si te puede la noche, si te gusta la buena parrilla y una selección de música top, no te pierdas nunca la experiencia Campobravo. Es un viaje de ida.