Pieza plástica

Por: Lucho Gutiérrez

Una de las obras surgidas del prestigioso  Festival Internacional de Dramaturgia Europa + América, se renueva aportando identidad y prestigio al infinito caudal de nuestra excelente manufactura teatral.

El ya consagrado director Luciano Cáceres reafirma su identidad artística con este texto del alemán Marius Von Mayenburg, al que recurre con el objeto de emitir un nuevo mensaje sobre los desajustes de nuestra sociedad, mostrando el principal síntoma: el núcleo familiar bombardeado por infinidad conflictos humanos como la insatisfacción, la neurosis, el desdén, la frustración sexual, la amoralidad y otros problemas que llevamos al interior de nuestros vínculos.

En la producción general de Cáceres podemos ver un hilo conductor, una estética, una coherencia de mensaje entre las últimas entregas y esta. Lo aprecian mejor quienes vieron "Esposas de dictadores". También pueden observar esta coherencia quienes lo han seguido a lo largo de su productiva carrera (basta entrar a su perfil en Alternativa teatral para darle el real significado a “productiva carrera”).

A lo largo de años fue formando un grupo compacto que es “su gente”. En esta entrega incorporó, además, destacadas actuaciones a su equipo: Florencia Benitez, Joaquin Berthold, Julián Calviño, Santiago Magariños y Daiana Provenzano.

Benítez compone a Ulrike junto al efectivo Berthold, quien es Miguel en esta obra. Ambos son los progenitores de Vincent, un excelente trabajo del joven Magariños.

Hay un dispositivo escénico compacto que dialoga entre el diseño y realización escenográfica de Agustín Garbelloto, un extravagante vestuario firmado por Ana Leiva  y Julieta Harca, y la siempre acertada propuesta lumínica de Gonzalo Córdova, que ya es un sello en las propuestas de Cáceres.

Aconsejo enfáticamente ver este espectáculo. No solo por las brillantes actuaciones; brinda la posibilidad de una reflexión que va mas allá de la mera visión de nuestra sociedad, de una denuncia clasista; es un material que es altamente provocador pero con un sentido edificante de los conflictos humanos de nuestras sociedades modernas. Agende y vaya, estará algunas semanas solamente.