RECOMENDADOR DE ARTES Y ESPECTÁCULOS

Retrospectiva

Luis Felipe Noé

Por: Ian Gall

Una nueva oportunidad de ver, en toda su extensión, la obra del gran maestro de la estética del caos. Una oportunidad única que durará hasta septiembre.

Curada por Cecilia Ivanchevich, esta exposición reúne pinturas, dibujos e instalaciones realizados a lo largo de sesenta años. Pone el acento en las constantes y variables entre 1957 y 2017 de un maestro que mira hacia el futuro.

Noé ha realizado una notable búsqueda, consiguiendo una superlativa calidad, reconocida por sus pares Ernesto Deira, Jorge de la Vega y Rómulo Macció, con quienes se circunscribe a la Nueva Figuración.

Aquí no tendremos un relato cronológico de su carrera, sino que lograremos captar el orden curatorial por la lectura de tres núcleos: la conciencia histórica, la visión fragmentada y la línea vital.

El primero lo muestra en su extensión de crítico irónico y a la vez un relato periodístico de cada proceso vivido con una opinión muy inteligente que lo ha señalado en toda su carrera.

El segundo exhibe la fragmentación de su obra, el artista muestra distintas realidades coexistentes. Consciente de su ubicación en tiempo y espacio, brinda su observación de la sociedad argentina.

El tercer núcleo  muestra un desarrollo de la línea vital como guía de la obra. Desde 1957, puede rastrearse el trazo a mano alzada que recorre el papel y que, en los años 70, dará pie a su vuelta a la pintura (Noé postulaba que el arte debía disolverse en la vida social, por lo que, entre 1966 y 1975, deja de pintar), cuando la línea y el color se unen para dar el sentido rítmico del cuadro. A partir de este período, el artista trabaja la naturaleza como sinónimo de la vitalidad latinoamericana.

Podemos ver desde una serie de dibujos inédita de 1957 a una instalación especialmente creada por el artista para esta muestra, Entreveros (2017), en la que Noé condensa planteos estéticos de sus distintas épocas y utiliza, entre otros materiales, fragmentos de espejos para incluir el reflejo del espectador en la complejidad del caos.

Impulsado por las propuestas derivadas de investigaciones de la superación del determinismo científico (causa-efecto), lo que marcó el ingreso en la posmodernidad, impulsa un sentido creativo que se basa en la teoría del caos como único origen de la creación impredecible.

 

Museo Nacional de Bellas Artes

MNBA.  Av. del Libertador 1473.

Podrá recorrerse en el Pabellón de exposiciones temporarias del Museo hasta el 20 de septiembre de 2017, de martes a viernes, de 11 a 20, y sábados y domingos, de 10 a 20, con entrada libre y gratuita.