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Estrenos argentinos

El Pampero

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Se estrena el segundo largo de Matías Lucchesi, ganador del Cóndor de Plata.

Hacía mucho tiempo que Julio Chávez no aparecía por las pantallas cinematográficas. Es una buena noticia tenerlo otra vez como protagonista.

En este caso, dirigido por Matías Lucchesi, autor de Ciencias Naturales (2015), delicada, íntima película que habla de una búsqueda.

Los personajes de El Pampero funcionan al revés: ellos no buscan,  más bien huyen de algo que pugna por alcanzarlos.

El personaje de Chávez está enfermo, pero quiere escapar de esa enfermedad. Quiere irse lejos y no cargar ni con el tratamiento, ni con el hijo que lo llama por teléfono, ni con la casa, ni con sus recuerdos.

El hombre acopia provisiones como para seis meses en su viejo velero y se embarca, dispuesto a morir en el río. Lo que no se espera es la aparición de una intrusa; una chica que se infiltró en el navío, también escapando de algo.

Con tomas cuidadas, sencillas y profundamente narrativas, el director se dedica a contar lo que ve y lo que oye de esos dos personajes.

En este guión (por mérito del propio Lucchesi y Gonzalo Salaya)  no hay voces en off, ni diálogos internos, ni monólogos explicativos. Se deja espacio para contar con la imagen. Para construir sólidamente con acciones, gestos, monosílabos, situaciones esbozadas que sin embargo describen un mundo.

Para poner en escena un planteo así, Lucchesi necesitaba actores de primera línea, y los consiguió, y los supo dirigir.

Julio Chávez se convierte literalmente en ese enfermo a la deriva. Un ser con cualidades insospechadas. Un hombre de pocas pulgas, pero capaz de grandes valentías. Su trabajo conmueve y enternece.

Pilar Gamboa es la polizona. Esta actriz ha crecido a pasos agigantados. Talentosa, vibrante, sensible, logra la intimidad  con Chávez que sostiene la película. Es un placer ver las escenas que comparten.

El tercero en conflicto directo es César Troncoso, como Mario, el prefecto del río. Su registro es el exacto para componer a un personaje difícil. Lo logra, despega aristas inquietantes y forma parte cómodo de este casting de notables.

La fotografía de los bellos paisajes del Litoral es de Guillermo Nieto. Una razón más para ver la película.

Matías Lucchesi es un director interesante porque tiene algo para contar. En su caso, es el tema de la paternidad; los hijos y los progenitores que se desencuentran; cómo se puede ser padre incluso en las circunstancias menos ortodoxas; incluso si la sangre es de otro. Él sabe cómo lidiar con esas ásperas ternuras; por eso lo recomendamos. 

 

Estreno en Buenos Aires: 3 de agosto.