RECOMENDADOR DE ARTES Y ESPECTÁCULOS

Comedia

Enamorarse es hablar corto y enredado

Por: Lucho Gutiérrez

La belleza de lo simple, ese aire fresco que nos acaricia dejándonos un encantamiento por algún tiempo, la sonrisa de un niño porque ve una mariposa.

Nuevamente Leandro Airaldo le pone la firma a otro acierto artístico, en un soporte completamente etéreo. Sorprende una vez más, como lo hiciera en tantos trabajos como Turistas que se pierden y bajan a la playa los días de viento o Me desconozco pero tengo memoria. Su mano se nota, como en el hermoso trabajo junto a Mariana Topet en el encuentro de textos que es Rapiña.

En este Enamorarse es hablar corto y enredado ubica a Pedro en el banco de una plaza que está en la cabeza de un alfiler y le acuerda un encuentro para toda la vida con Ana, una tímida y adorable chica de ciudad. Él, un experimentado y solitario hombre de campo, conoce el valor de los silencios y las palabras justas.

Soledad Piacenza y Emiliano Díaz,  bajo la dirección de Airaldo, logran dar vida a dos seres que el público quiere llevarse y ponerlos en la mesita de luz, se siente el deseo de no perderlos, de no interrumpir esa coincidencia y pasar a visitarlos de cuando en cuando.

Un simple y gran trabajo que nos recuerda los encuentros lindos en la vida.

Él le da charla y ella piensa en irse, él le convida un mate y ella conoce su sabor, él la describe y ella siente que la descubrieron. Ella lo completa y es lo mas hermoso que a él le pasó.

Así de simple es el amor, ese objeto tan ontológico que está sostenido sobre una fantasía, la mirada del otro.

Sin lugar a dudas que el mundo seguirá su curso y nos mantendrá inmersos en esta vorágine alejada de Pedro y Ana, pero vaya y acérquese un poco a esta realidad, que seguramente le hará mucho bien.

El Camarín de las Musas.

Mario Bravo 960.  sabados 20.30.

www.elcamarindelasmusas.com