Maria Creuza

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La reina de la bossa nova se presenta en Buenos Aires en el marco de una gira que la llevará por todo el país.

Maria nació en Bahía, tierra misteriosa, surcada por ecos africanos, en febrero de 1944. Desde muy chiquita se reunía para escuchar música con su familia.

A los 15 años empezó a estudiar  teatro y canto con los mejores profesores de la ciudad.  Siempre supo que iba a dedicarse al arte. Tenía tal confianza en su destino que en 1966 se presentó en un concurso de nuevos talentos y lo ganó.

Fue un flechazo eterno entre ella y el público. Con menos de 20 años, ya tenía discos, presentaciones en vivo y hasta un programa de TV, Encontro con Maria Creuza. En 1969, la canción Mirante le dio el premio a la mejor intérprete y el tercer lugar en el IV Festival Universitario de la Canción Pop en Río de Janeiro.

En 1970, el poeta y cantante Vinicius de Moraes la invitó a una excursión por los balnearios uruguayos y argentinos. En Mar del Plata se encontraron con Toquinho. Luego de un agradable tiempo de vacaciones, grabaron los tres, en Argentina, el álbum conocido como Vinicius en La Fusa, uno de los mejores discos grabados en vivo de la música brasileña.

 A partir de entonces la carrera de Maria Creuza se desplegó totalmente y es desde hace casi 50 años una de las figuras más importantes de la historia de la bossa nova y la música popular brasileña. Cuenta con más de 20 discos editados e innumerables giras por todo el mundo.

Hoy es una cantante consolidada, que mantiene su registro inigualable. Conserva toda su riqueza vocal, su ternura y su magia.

En su única presentación en Buenos Aires abordará un repertorio de temas de su maestro Vinicius, pero también de Tom Jobim, Baden Powel o su admirado Djavan.

Garota de Ipanema, A felicidade, Chega de saudade, Tarde em Itapoã, Vocé abusou, Corcovado, Samba em prelúdio, Meu bem querer, sonarán en el Auditorio de Belgrano, antes de que ella siga haciendo camino al andar, tocando y amando por diferentes ciudades de Argentina y Chile.